Las negociaciones entre el Gobierno de EEUU y la UE fijan inicialmente un arancel del 15% a los medicamentos exportados por Europa, sin aranceles recíprocos. En una primera estimación, el coste de los aranceles para la industria farmacéutica en Europa asciende a unos 18.000 millones de euros, un sector que no puede repercutir sus costes en aumentos de precios finales.