Ana Bosch, directora del Departamento Jurídico de Farmaindustria; María Río, directora general de Gilead; Raquel Tapia, directora general de Iberia de Sanofi Genzyme; Elena Álvarez, directora de MCR Internacional, e Inés Perea, directora general para España y Portugal de Jazz Pharmaceuticals, que contaron con la moderación de Eduardo Sanz, director de Farmaforum.
La industria farmacéutica innovadora supera en España los 42.500 empleos. Más de la mitad de los profesionales son mujeres (52%), el doble de la media de los sectores industriales. De hecho, ningún sector industrial, salvo el de confección de prendas de vestir y la propia industria farmacéutica, supera el 50% de empleo femenino. Y esta realidad sigue avanzando, ya que casi el 60% de los nuevos contratos corresponden a mujeres.
El porcentaje es aún mayor en el área de investigación, donde 2 de cada 3 profesionales son mujeres, y es, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el sector de la economía española que mayor porcentaje de investigadoras presenta (66,4%). Esto es aún más relevante por cuanto hablamos de la razón de ser de la industria farmacéutica: la investigación y desarrollo de nuevos medicamentos. De hecho, es, junto a la automoción, el sector industrial líder en inversión en I+D: uno de cada cinco euros que invierte la industria en I+D en España procede de la industria farmacéutica.
El liderazgo femenino se concreta también en los puestos directivos. La industria farmacéutica está en cabeza: más del 40% de los puestos directivos están desempeñados por mujeres, muy por encima de la media del resto de sectores.
Ana Bosch, directora del Departamento Jurídico de Farmaindustria, expuso estos datos, entre otros, este martes en el congreso Farmaforum 2021, que se celebra en Madrid, para explicar la posición de vanguardia de la industria farmacéutica en cuanto a igualdad de oportunidades y fomento del talento femenino.
Asimismo, también es un referente en la lucha contra la diferencia salarial, ya que “es el sector productivo industrial con mayor salario medio femenino (superior a 38.000 euros) y el que registra menor diferencia de salario entre hombres y mujeres (menos del 10%)”, subrayó Bosch.
Empleo de calidad
“Todo esto -añadió- dentro de un sector vinculado a la innovación y con empleo de alta cualificación y calidad, en el que dos de cada tres puestos son titulados superiores, el 94% es indefinido y es líder en productividad. Y casi una de cada tres nuevas contrataciones corresponde a menores de 30 años”.
“Se trata de un sector avanzado y estratégico para cualquier país moderno desde la triple perspectiva sanitaria (el 95% de los medicamentos disponibles son desarrollados por la industria farmacéutica), económica (cada euro invertido en producción en la industria farmacéutica genera entre uno y dos en otros sectores) y social: además del empleo de calidad y otros aspectos, el medicamento es salud, y de ésta dependen la economía y el bienestar, como ha constatado la pandemia”, concluyó.
Bosch compartió mesa con algunas de las líderes del proyecto Mujeres en Farma y responsables de compañías en el sector, como Raquel Tapia, directora general de Iberia de Sanofi Genzyme; Inés Perea, directora general para España y Portugal de Jazz Pharmaceuticals; María Río, directora general de Gilead, y Elena Álvarez, directora de MCR Internacional.